Nadie Quiso Escuchar—¿Qué Podemos Hacer?
En una empresa imaginaria, lanzamos un proceso de selección para contratar a un CEO y llegamos a dos candidatos finales:
Candidato A: Un empresario con experiencia, pero con antecedentes penales por fraude financiero y acusaciones de conducta sexual inapropiada.
Candidato B: Una abogada con experiencia como fiscal y vicepresidenta, dedicada a la administración púbica y de la justicia.
Sorprendentemente, la mayoría del comité de selección (cinco de nueve miembros) recomendó al Candidato A, el que tiene antecedentes de fraude financiero y conducta sexual inapropiada. A pesar de que los otros cuatro miembros presentaron pruebas sustanciales en contra de esta elección, la mayoría las ignoró. ¿Por qué pasar por alto señales de alerta tan serias?
Una Lección del Pasado: El Caso de Bernie Madoff
Entre 1999 y 2008, Harry M. Markopolos alertó repetidamente a la Comisión de Bolsa y Valores de los EE.UU. (SEC, por sus siglas en inglés) sobre el esquema Ponzi de Bernie Madoff. Markopolos proporcionó evidencia en los años 2000, 2001 y 2005. Sin embargo, no fue hasta diciembre de 2008—cuando los hijos de Madoff lo denunciaron al FBI—que salió a la luz el esquema de $65 mil millones. Aproximadamente el 10% del dinero provenía de organizaciones sin fines de lucro, y más de 40,000 familias perdieron sus inversiones y, en muchos casos, los ahorros de toda su vida. Si la SEC hubiera actuado con base en las advertencias de Markopolos, el impacto podría haberse reducido a aproximadamente $18 mil millones. ¿Por qué no escucharon? A menudo, la naturaleza humana resiste verdades incómodas, y la evidencia que contradice nuestras creencias o sesgos puede ser ignorada. En este caso, la SEC tendía a desestimar las denuncias de informantes, especialmente cuando provenían de un competidor. (Ver el libro “No One Would Listen: A True Financial Thriller”)
¿Qué Podemos Hacer Ahora?
Con un CEO poco ético en el cargo y el fraude potencialmente en el horizonte, ¿qué acciones podemos tomar?
Reconectar con la Comunidad: Construir alianzas con colegas, miembros de la junta, proveedores y otras partes interesadas para defender los estándares éticos.
Crear una Estructura de Administración Responsable (Accountanbility): Establecer mecanismos para asegurar transparencia e integridad, como la verificación independiente de los registros financieros.
Concientizar Sobre Tácticas de Manipulación: Educar sobre cómo los líderes poco éticos pueden manipular usando religión, sesgos de género, nacionalidad o creencias personales.
Ser Conscientes de Nuestros Propios Sesgos: Reconocer que los sesgos personales pueden nublar el juicio. Adoptar un enfoque objetivo en la toma de decisiones ayuda a evitar suposiciones dañinas y a respaldar decisiones éticas y justas.
“Eres lo Que Lees”: Asumir la responsabilidad sobre nuestras fuentes de información. Comprometerse con fuentes creíbles y basadas en hechos para evitar la desinformación.
Cada Decisión es una Decisión Ética
Votamos con nuestras decisiones y con nuestro dinero. Todos los días tomamos decisiones—desde los productos que compramos en la tienda hasta los líderes o empleados que elegimos. Cada decisión es económica, política y ética. Para crear un mundo mejor, debemos educarnos sobre el impacto de estas decisiones y asegurarnos de que se alineen con nuestros valores. Al apoyar productos y servicios basados en una cadena de valor ética, podemos acabar con las injusticias y promover un futuro sostenible.
Fomentemos una cultura de toma de decisiones ética, que valore la integridad en todos los niveles. A través de la educación, la concienciación y la responsabilidad, podemos elegir y apoyar un liderazgo ético para un mundo mejor.
Referencias: [Ballot image from 123RF, Kebox ID 18049049]
#Liderazgo #Ética #Integridad #Voto
Únete a mí para luchar contra el cambio climático con Sunrise
El Cambio Climático es, sin lugar a dudas, el desafió global más importante de nuestra generación. Todos tenemos la responsabilidad de resolver el problema por el futuro de nuestros hijos e hijas.
Desde mi juventud en Puerto Rico, aprendí que la lucha en proteger el medio ambiental era vital al desarrollo humano y económico. Participé en muchas acciones, desde la oposición a la explotación minera en Adjuntas; a ser candidato a la Asamblea Legislativa de Puerto Rico con un programa ambiental; y desobediencia civil para detener las prácticas militares en la isla de Vieques.
Vote por los y las que no pueden votar
Recientemente me emocioné cuando leí que la Comisión Estatal de Elecciones de Puerto Rico (CEE) anunció que estaba lista para el Voto por Teléfono porque le provee una oportunidad de independencia y secretividad a las personas con diversidad funcional.
Cuando trabajé en la CEE (2001-2008) tuve el honor de ser parte del diseño e implementación del proyecto por teléfono que por primera vez se implantó el 1ro de junio de 2008 y 4 de noviembre de 2008. Fué un hito porque representó la primera vez en la historia de Puerto Rico que las personas con diversidad funcional tenían la oportunidad de votar independiente y de manera secreta. [2]
Diáspora con Dalmau
Diáspora con Dalmau es un grupo de Boricuas en la diáspora que respaldamos la candidatura a la gobernación de Puerto Rico del Senador Juan M. Dalmau Ramírez
Hemos organizado una serie de conversatorios en donde discutimos los aspectos más relevantes para la diáspora de los proyectos de ley presentados por el Senador y de las propuesta que presenta el Senador Juan Dalmau para un nuevo gobierno (#PatriaNueva) como candidato a la gobernación por el Partido Independentista Puertorriqueñ0 (PIP). Los conversatorios son, en general, todos los miércoles a las 5:oo PM ET a partir del 8 de julio al 4 de noviembre de 2020. Las mismas cuentan con la participación de un panel de independentistas en la diáspora en el contexto de las nuevas reglas del voto ausente. Entre ellos son Carlos Iván Vargas Silva (Inglaterra), Luís Sánchez Ayala (Colombia), Eric Ramos Rodríguez (New York), Eliasib Vélez Reyes (Florida), Rafael Ruíz Ayala (Illinois), Jessenia Bruno (Texas), Abimael Rodríguez (Florida), Miguel Fiol (Minesota) y este servidor Jesús M. Pizarro Rodríguez (Arkansas). Se pueden registrar para estos conversatorios en este enlace.
También pueden unirse a los conversatorios en la página de Facebook Diáspora con Dalmau , en el canal de YouTube , Twitter @ DiásporaDalmau , en tu podcast favorito o aquí:
El Electorado es el responsable a la respuesta al COVID-19
Las advertencias de los presidentes estadounidenses George W. Bush (2005), Barack Obama (2014) y del informático y filántropo Bill Gates (2015) sobre los riesgos de una pandemia son la evidencia más reciente de que el sistema actual de gobierno no está funcionando.
A simple vista se pudiera concluir que el problema es la inacción del Congreso de los Estados Unidos y del actual presidente. Aunque es cierto, yo responsabilizó principalmente al electorado “porque estos políticos no llegaron solo.” [1]
Los sistemas electorales, aunque son muy susceptibles al fraude, esta vulnerabilidad no ha sido un factor decisivo en la mayoría de las elecciones en los países “democráticos.” Además, el electorado ha tenido acceso a la información precisa para tomar una decisión informada. Por ejemplo, el desempeño del presidente Donald Trump y del gobierno del «renunciante» ex-gobernador de Puerto Rico, Pedro Roselló Nevares, ha sido y fue el que se esperaba antes de las elecciones del 2016.
Las criptomonedas son una herramienta para manejar la crisis global
Lamentablemente la pandemia COVID-19 está causando las muertes de miles de personas y una nueva crisis internacional. La Reserva Federal de los Estados Unidos ha bajado los intereses al mínimo y el gobierno emitirá dinero (deuda) de una manera sin precedente.
Hace doce años, tuvimos una experiencia similar donde el Gobierno tuvo que ir al rescate de las instituciones financieras a consecuencia de productos financieros muy riesgosos (para mucho fraudulentos) que a su vez ocasionó un pánico bursátil a nivel mundial, una de las razones de la crisis alimentaria global del 2007-2008 y la razón principal de la gran recesión del 2008.